Los primeros ejemplares de los mamiferos correspondían a pequeños roedores que evolucionaron de algunos reptiles hace 200 millones de años. Tenían un tamaño pequeño, eran capaces de generar calor, poseían una mandibula para masticar y el tamaño de su cráneo era grande en comparación a los demas animales. Debido a que predominaban los reptiles los mamiferos tuvieron poca preponderancia, pero esto cambió al extinguirse los dinosaurios.
Al producirse la misiva extinción de los dinosaurios, los mamiferos sobrevivientes se multiplicaron y diversificaron generando nuevas especies que pronto fueron las dominantes en La Tierra.
Roedor primitivo perteneciente a la familia de los mamiferos.